El trabajador de atención juvenil es un puesto no exento responsable del bienestar y la seguridad de los niños en el Programa de Niños No Acompañados. Las responsabilidades incluyen monitorear el bienestar de los niños, proporcionar apoyo y ser un modelo a seguir positivo, ayudar con las actividades diarias y citas, transporte, intervención en crisis y garantizar que se protejan los derechos de quienes están en el programa.